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jueves, 19 de diciembre de 2024

Este jueves un relato: "Vuelo de fotos"

Este jueves me uno a la propuesta de: ARTESANOS DE LA PALABRA quienes nos proponen lo siguiente:

Imaginen una historia que puede ser de amor, odio, tristeza o de humor, de mucho humor, que no supere las 350 palabras para que todos podamos leernos y comentarnos, sabemos que por estas fechas todos estamos más ocupados y corriendo, por eso tratemos de cumplir con lo pedido.

Dejemos volar la imaginación como esas fotografías volaron y a escribir, por acá los esperamos.

                                                   Patricia y Rosana


Y este es mi relato (no tan apegado al disparador que dieron, pero va con amor)


Habían soñado toda su vida, 40 años juntos, con ese momento de la jubilación que por fin había llegado. Tenían planeado que cuando estuvieran libres de horarios y obligaciones, iban a tomar sus ahorros, pocos, a vender el departamentito de la Capital que habitaban y con eso, se irían lejos. Muy lejos.

Sus dos hijos, ya grandes, tan ocupados, no tenían mucho tiempo para ellos.

En unas vacaciones pasadas habían conocido las sierras y supieron de inmediato que ese iba a ser su futuro hogar.

Vendieron el departamento, eligieron lo que se iban  llevar y el resto lo dejaron atrás.

La plata les alcanzó justo para comprar una casita chica, pero pintoresca a pocos metros del río y con vista a las altas cumbres. Habían logrado que el dueño anterior les bajara el precio ya que por esas cosas de la vida, mientras ellos querían huir del ruido de la capital, él quería instalarse en el caos porteño. Con mucha ilusión y poca experiencia hicieron la transacción.

Con ayuda de los vecinos nuevos la pintaron, la decoraron y la hicieron su hogar. Conocieron nuevos amigos, adoptaron varias mascotas y su vida fue soñada durante todo el otoño y el invierno. Pero cuando llegó el verano el calor empezó a ser insoportable, el río como por embrujo se secó y el agua del arroyo no alcanzaba para nada.

Una mañana se levantaron a desayunar y cuando salieron a la galería vieron los incendios. Estaban lejos de las llamas, pero el viento no les favorecía. Hasta ahora nadie les había avisado que esa zona cada tanto se incendiaba, ni que cada año el fuego se acercaba un poco  más.

A los pocos días ya tenían las llamas encima, entre los vecinos apagaban como podían los focos de fuego, hasta que no pudieron respirar más. El humo ya era intenso.

Entonces llegaron los bomberos, la ayuda solidaria, el dejar la casa, las mascotas, los sueños.

Recién a los dos meses pudieron volver para ver lo que había quedado. Bajaron del auto que los había llevado con el horror en el pecho.

Todo era cenizas, la casa escombros, el jardín un cementerio. Lloraron abrazados por horas hasta que cansados se dispusieron a volver. A los pocos pasos, sorprendidos, vieron sobre una mata verde impoluta, que había resistido el fuego, una foto, un retrato enorme de ellos dos abrazados el día de su casamiento.

Se miraron con todo el amor que se tenían, sonrieron y entrelazando sus manos emprendieron la marcha hacia un nuevo comienzo.


                                                                               Sindel Avefenix

 

Para más fotos volando ir a: Artesanos de la palabra








Todos los textos que están expuestos en este blog son propiedad intelectual de mi persona y están registrados bajo el nombre Sindel Avefénix. Salvo menciones expresas de otros autores.

18 comentarios:

  1. Muy bonito texto. El caprichoso fuego y el asfixiante humo habían colocado aquella foto en su camino.
    Veo que todos tus relatos hacen honor a tu nick, y que siempre acaban con un renacimiento.
    Abrazooo

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    1. Hola! Muchas gracias por leerme! En este caso quise dar ese toque de esperanza. Puede ser que tengas razón y sea mí manera de cerrar los relatos. Beso

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  2. Un texto donde la nota que predomina es el amor de la pareja, allá donde esten ellos está el amor y el hogar de verdad. Que faena que esas llamas quemaron sus ilusiones.
    Pero nunca terminarán con el amor, ya lo formarán en otro lugar. Un besote, y repito precioso relato.

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  3. Un nuevo comienzo entre dos personas de fidelidad indestructible. Una llamada a la valentía y la esperanza como apoyos fundamentales para salir adelante en la vida y... resurgir de las cenizas.
    Felicidades, Sindel.

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  4. Es un himno, un homenaje al amor tu relato Sindel, me encantó.
    Sin dudas me recordó a nuestra provincia de Córdoba, con sus sequías e incendios, con las pérdidas humanas y de animales, así como de las propiedades.
    Me encantó el broche final lleno de esperanza en ese brote verde y la foto que se salvó del fuego.
    Muchas gracias por participar de nuestra propuesta, un abrazo grande
    PATRICIA F.

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  5. Que bonito estáis solucionando la propuesta de Artesanos de la palabra, son historias emotivas que tal y como la escribes es perfectamente creíble. Un abrazo

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  6. Una historia conmovedora, Kari. Sumamente actual para quienes hemos escuchado de todo el daño que pueden provocar esos incendios desastrosos. Un abrazo

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    1. Hola Moni! Está un poco tomada de la realidad serrana de nuestro país! Un beso !

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  7. Hola Sindel, un texto precioso y emotivo. Tras perder lo poco que tenía, la esperanza llegó con esa foto. Me gustó mucho. Un abrazo y feliz Navidad

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    1. Hola Nuria! Me alegra que te haya gustado el final de la historia. Un abrazo

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  8. Una historia bellísima... "había resistido el fuego, una foto, enorme de ellos dos abrazados el día de su casamiento. Se miraron con todo el amor que se tenían, y emprendieron la marcha hacia un nuevo comienzo... Me encantó.
    Creo que ya comenté, pero por si acaso.
    Un abrazo gigante

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  9. ¡Qué horror! Ella fuego donde llega hace estragos y en el caso de ellos, fueron afortunados, porque no sólo se salvaron ellos sino sus recuerdos, que les dieron fuerza para empezar una nueva vida.
    Un besazo, Sindel

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    1. A veces el destino nos deja una muestra de recuerdos que nos aviva la esperanza. Un beso!

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  10. Muy bonito. El amor es la fuerza mayor, más que el fuego, más que nada... Precioso, Sindel, es un relato bien esperanzador.
    Muy feliz Navidad, un abrazo

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