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miércoles, 5 de octubre de 2011

Convocatoria: Este jueves un relato "Idolos"

ídolo
Figura de un dios al que se adora.
Persona o cosa excesivamente amada o admirada.




 Cuando era chica todos mis amigos tenían algún ídolo al que admiraban. Algunos eran artistas, superhéroes, o deportistas. Juntaban figuritas, compraban muñecos y todo lo que les sirviera para mostrar el orgullo que sentían por ellos. Yo, en cambio, tenía mi propio ídolo que no era nada de eso, pero que tenía de todos un poco. ¡Lo admiraba tanto!
Desde que tuve uso de razón comencé a elevarlo por sobre todos los demás. Me encantaba estar a su lado y observarlo mientras hacía sus cosas. Trepada a sus rodillas, y metida como un ratón en todos lados le iba alcanzando todo lo que le hiciera falta. De su mano aprendí a cocinar, a escribir versos, a tallar, a arreglar la plancha, colocar un enchufe y hasta a enduir las paredes para después pintarlas. Si tenía una duda en las tareas del colegio, esperaba a que llegara y él con su paciencia infinita me la resolvía. Sabía hablar de cualquier cosa y explicar todo en su justa medida sin una palabra de más ni una de menos.
Los sábados ibamos al cine a ver películas de extraterrestres, de terror, y de vez en cuando al circo. Los domingos, eran otra cosa, íbamos a la cancha a ver a Racing, a veces a Ferro, cualquier excusa era buena para gritar un gol. Era una de las pocas nenas que iban a la cancha, pero eso lo hacía más especial todavía. Desde mi pequeña altura lo veía como un gigante, un oso que me abrazaba todas las noches cuando llegaba del trabajo, brindándome una sonrisa cariñosa y una golosina escondida en una de sus enormes manos. Era perfecto, querible, y el mejor de todos los papás que alguien pudiera desear.
Cuando fui creciendo, y a medida que ese ídolo fue cometiendo errores comprendí que su parte humana era mucho más real que todo aquello que yo había divinizado. Aquel hombre perfecto, un semi dios para mi mirada inocente, que estaba siempre presente y constante, se fue convirtiendo en un padre ausente, cada día más despreocupado, y con un humor insoportable. Hasta que, de un día para otro nos dejó a la buena del destino, cerró la puerta y se fue sin mirar atrás. 
Con una mochila cargada de enigmas sin resolver, me quedé esperando que volviera, y en esa espera vana e interminable, su figura gigantesca, elevada por mi necesidad de idolatrarlo, empezó a desmoronarse a mis pies poco a poco hasta convertirse en una decepción triste plagada de ausencia.
Hoy, ya siendo adulta y habiendo superado el abandono, me pregunto como una persona así, con tanto brillo se puede volver en un instante tan opaca. Y la respuesta está ahí mismo, frente a mis ojos, en la pregunta misma. "Justamente, porque siempre fuiste una persona, viejo, nunca fuiste un dios, ni un ídolo, eso fue algo que yo me había inventado. Fuiste lo que pudiste, y al irte de casa, quien sabe porque, elegiste llevarte lo mejor de vos, y dejarnos esto."



MAS RELATOS DE IDOLOS EN: EL BALCON DE CAS

28 comentarios:

  1. Idolos de carne y hueso,casi humanos.Con sus luces y sus sombras.Pero en definitiva somos parte de ellos,casi una extension.

    cariñitos

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  2. uffff.... que relato en crudo... no cruel sino crudo... visceral... de esos que se escriben con sangre, de los reales, de los que a mi entender son fantásticos porque descubren la esencia de la persona que lo escribe.... y no puede ser escrito de otra forma... sin dudas una sabia reflexión... no es más que una persona... y yo creo que lo que se llevó o no se llevó ya no importa... porque sin duda no llevarte a vos es dejar un tesoro valioso para que los demás puedan descubrirlo... tu relato...el mejor de este jueves...besos!

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  3. Gracias Yonki!!! por asomarte a leerme, es cierto ídolos de carne y hueso, entónces hay que comprender que en realidad no lo sean.
    Gracias Gastón!!! Veo que mi relato te ha llegado tal y como yo lo quise escribir, son muy lindas tus palabras, me emocionaste con lo que me pusiste al final del comentario, besos!!!

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  4. Hace tiempo que entiendo por idolatria no esa actitud de quien se siente fascinado por alguno, sino el culto o la liturgia. La esperanza de respuesta a lo imposible inclinando el torso.
    Por lo demás, a los idolos de mármol también se les olvida.

    Tésalo

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  5. También yo pensé en hacer protagonista del relato de este jueves a mi padre, por lo que significa para mí. Aunque nunca me ha decepcionado, llegó un día en que descubrí que era una persona como las demás, de carne y hueso, con muchas virtudes pero también defectos. Ahora lo admiro. Tu relato es de los que salen del alma. Un beso.

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  6. Querida amiga. Acabo de ver tu comentario en mi blog. Sigo de viaje asó que me "asomo" algún rato.
    Gracias por tus palabras-
    Mira, las dudas que tengas sobre el blog me las puedes hacer llegar a mi correo Maruja@Rufes.com. Lo que esté a mi alcance, estaré encantada de explicártelo.

    Tu historia me ha resultado muy triste; sobretodo porque debe ser muy corriente a los ojos de los hijos cuyos mayores (padres, abuelos) corten su relación.
    El que los niños durante su vida tengan varias etapas de admiración a sus mayores más cercanos es natural.
    Con la madre, con el padre... hay una relación de idealización. Con el tiempo, vamos conociendo la realidad, viviéndo la realidad de una forma natural. En este caso la repentina marcha del padre crea un vacío enorme en ésa niña... Un relato escrito con maestría, como es habitual en ti.
    Un besito querida amiga,

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  7. Intenso relato, cargado de sentimientos, tremendamente vivo. Me costó emocionalmente seguir el giro de la historia, como a ti te costaría asumir el curso de esa historia.
    Conozco y comprendo tu historia, mi padre abandonó también la casa. Nunca tuvimos un especial vínculo pero cuando se marchó, a mis veinte años, empezábamos a ser amigos.
    Besos

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  8. Intenso relato, cargado de sentimientos, tremendamente vivo. Me costó emocionalmente seguir el giro de la historia, como a ti te costaría asumir el curso de esa historia.
    Conozco y comprendo tu historia, mi padre abandonó también la casa. Nunca tuvimos especial vínculo aunque cuando se marchó, a mis veinte años, empezábamos a ser amigos.
    Besos

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  9. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  10. Muchas gracias Leonor, en este caso se me ocurrió hablar de esto para mostrar que uno idealiza y en realidad son solo seres humanos como vos decis con virtudes y defectos. Un abrazo.
    Juan Carlos: Que bueno que te haya causado emoción mi relato, son cosas duras de la vida pero que nos ayudan a crecer y a intentar ser mejores y no repetir los mismos errores. Un beso y gracias!!!
    Tésalo: Justamente por eso pongo la definición de Idolo al comenzar el relato. En mi caso quise hablar de esa definición que dice persona amada en extremo o admirada por demás. Gracias por leerme. Un abrazo.
    Maruja: Mil gracias por tus palabras, creo que estas cosas son pruebas del destino que nos ayudan a fortalecernos, aunque en el momento se pase un mal trago. Espero que lo estés pasando hermoso, te agradezco mucho que me hayas leído.
    Gracias por ofrecerte a ayudarme con el blog, cualquier pregunta te la mando por correo. Un abrazo gigante!!!

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  11. Cuando somos niñós, ¿Quien no ha idolatrado a su padre? es normal; pero luego ese ídolo se vuelve humano, como todos, con sus defectos y si lo hemos idolatrado en exceso se nos cae al vacio sin remedio. Los humanos somos seres vulnerables
    Un abrazo

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  12. Querida

    No puedo dejar de emocionarme con tu relato, no imaginè un final asì, lo mio es a la inversa, ausente toda la vida, pero presente, hoy a sus 84 años, viejo y con los problemas de la edad me reclama, me exige, pretende una entrega que no pudo dar, al igual que vos lo he comprendido, perdonado y aceptado.

    Hizo y hace lo que puede, es mi padre y lo seguirà siendo con toda la carga de defectos y su desamor hasta el ùltimo dìa, yo tratarè de proporcionarle lo mejor hasta el ùltimo dìa.

    Un abrazo muy grande, fue muy lindo leerte.

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  13. Carmen es cierto que uno tiene tendencia a idealizar a los padres, pero con el tiempo nos sorprende darnos cuenta que son tan humanos como nosotros. Un abrazo y gracias por leerme.

    Vacaciones (perdón pero no sé como buscar tu nombre soy nuevita por acá) Muchas gracias por tu comentario, si te emocioné ya cumplí mi cometido, en eso consiste escribir. Tu historia es muy interesante y emotiva también, y te puedo asegurar que te comprendo. Son cosas de la vida, lo importante es que todo lo que nos pasa nos ayuda a crecer y mejorar. Un abrazo.

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  14. Me conmovió tu historia porque se parece en algo a la mía. Mi viejo también fué una especie de ídolo para mi. Y también fué en cierta en forma un padre ausente, no porque desapareciera, sino porque se fué a vivir a otro lugar y aunque el contacto era permanente y estrecho, no es lo mismo que haberlo tenido en casa.
    También comprendí después de mucho tiempo que hizo lo que pudo, como le salió, pensando en que era lo mejor. Y aunque tuvo los pies de barro como todos, en algún lugar de mi corazón sigue siendo mi ídolo personal, y me acompaña hoy desde alguna estrella.
    Un gran abrazo

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  15. Any muchas gracias por visitarme, es cierto que todos idealizamos un poco a los padres y nos olvidamos que son humanos con errores y aciertos. Unos hacen las cosas de mejor manera y otros no tanto, pero creo que lo importante es aceptarlos como son. Tu historia también es parecida, y me alegra que puedas conservar una buena imagen de él.
    Un abrazo enorme.

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  16. Me pareció muy emotivo tu realato, escrito desde el corazón. Está escrito desde tu mirada actual que se nota reposada como comprendiendo el carácter de las cosas, me parece buenisimo como le diste ese tono entristecido por la incomprensión y por la decepción pero desde la adultez.
    Te mando un gran beso

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  17. todos hacemos lo que podemos y lo mejor que nos sale, como amigos, como hijos, como padres, como nietos, y la infinitud de roles por los que pasamos en este trayecto.
    qué bueno que mereció estas letras, qué bueno que haya habido aceptación.

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  18. Ceci: cuando uno es adulto mira las cosas con otra perspectiva, con más comprendimiento pero igual son cosas que nos marcan, por eso quizás notaste un aire nostálgico en el relato. Gracias por pasar. Un beso gigante :)

    Rochitas: Es tal cual lo decís en tu comentario, uno hace lo que puede,algunos mejor otros no. Lo importante como ya lo dije antes es que nos enseñe a crecer y a aceptar. Un abrazo.

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  19. Tu relato, visceralmente escrito desde el corazón abierto y los sentimientos a flor de piel, es un viaje de ida y vuelta. Viaje de ida hacia la admiración, la deificación de un ser amado, en este caso tu padre, en el cual no apreciamos imperfecciones ni defectos y otro de vuelta hacia el aterrizamiento del idolo, hacia la perplejidad y el desencanto que nos produce comprobar que nunca fué dios ni ídolo, sino un simple mortal que como todos, era imperfecto y débil.
    Me ha encantado tu relato.
    Un abrazo.

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  20. no seré yo hoy, sindel, el que te diga si me gusta o no tu relato, si está bien o mal escrito..hoy eso me da lo mismo...pero lo que no me da lo mismo es la emoción que me has causado, esa emoción que se plasma con el intento de un par de lágrimas de salir por mis dos ojos a la vez...ah, las he dicho que se queden por denode mí, que otro día ya saldrán...
    gracias por haberme emocionado...
    medio beso.

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  21. Nuestros padres son nuestros referentes, nuestros ejemplos a seguir y creo que nunca uno esta preparado para asimilar que desaparezcan para no volver. Los años dan reflexión y su lugar a las vivencias, como tu nos has expresado en tú relato.

    Besos

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  22. Pepe: Muchas gracias por leerme, y por tus lindas palabras, es un placer que hayas disfrutado de mi relato. Un abrazo.

    Gustavo: Que bueno lo que me escribis!!! Que te haya emocionado hasta ese punto es un halago enorme para mí, y es cierto ya pierde importancia si es un buen o mal relato, si logró conmoverte ya cumplí mi cometido. Muchas gracias. Un abrazo.

    Matices: Los años curan, ayudan, nos enseñan a ver las cosas desde otra óptica más benévola y comprensiva. Gracias por tus palabras. Un abrazo.

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  23. Podría deducirse que los ídolos sólo lo son, hasta cierta edad. Aquella en la que sólo vemos las dimensiones, las protecciones, los imposibles realizados facilmente.

    Lo cierto es que nadie nos puede negar que no hayan existido. Somos nosotros los que ampliamos nuestra percepción de la realidad al tiempo que esta de deforma o cambia.

    Relato interesante, por lo real y cotidiano que podría parecer.

    Besos.
    Alfredo

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  24. Esa debe ser la peor manera de ver desmoronarse al ídolo construido junto con todo lo que creíamos que representaba.
    Un padre, por supuesto es un ser humano y como tal tiene virtudes y defectos. Lo incomprensible -y lo que más duele, sin dudas- es que en determinado esos defectos tiren abajo todas las virtudes antes demostradas. Quizás sólo el egoísmo sea capaz de destruir tanto luego de haberlo construido.
    Muy emotiva tu historia.

    Un saludo juevero.

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  25. Cuando se es niño se magnifica lo bueno y lo malo. Leer tu historia es ir bajando por una escalera hasta la plaza de la realidad. Cuanto dolor.
    Pero el tiempo se encarga de poner cada cosa en su lugar.
    Un beso para ti y un pedestal de ternura.

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  26. Alfredo: Muchas gracias por pasar y por tus palabras,es cierto que muchas veces sobre dimensionamos las cosas. Un beso.

    Neogeminis: El tiempo se encarga de mostrarnos la realidad, y aunque duela nos sirve para crecer y conocer verdaderamente a las personas que elevamos por demás. Un abrazo y gracias por pasar

    Rosa: Que buena definición de mi relato, es exactamente eso. Gracias por leeerme. Un abrazo gigante.

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  27. querida Sinde, has explicado de una magistarl manera el proceso de individuacion que todos seguimos. Ese proceso doloroso donde los idolos se van destruyendo y se convierten en personas de carne y hueso, con virtudes y defectos. La fortuna tuya es poder reconocerlo.
    Me ha encantado.
    Besos

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  28. Gracias María José, me alegra que te gustara mi relato, un abrazo.

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Muchas gracias por tu visita y por dejarme tu opinión.