Esta semana José Vte. nos propone escoger una imagen de varias que ha presentado sobre personas que han padecido polio y escribir algo sobre ellos. Yo he elegido esta para mi relato.
Pido disculpas por excederme en la cantidad de palabras, pero no he podido recortarlo más.
Cuando me tocó hacer una entrevista corta, como trabajo práctico, no dudé en pedirle a mi vecino, Julián, que fuera el entrevistado. Aceptó de inmediato, así que quedamos para la mañana siguiente.
Lo esperé en el bar de la esquina, sentada en una mesa que está sobre la calle, elegí ese lugar para aprovechar el calorcito matutino.
Llegó puntual, con su silla de ruedas motorizada y una sonrisa luminosa que encendió la mañana.
-Buen día- me dice, mientras acompaña la sonrisa abriendo sus enormes ojos negros que también brillan.
-Buen día. ¡Qué bien se te ve esta mañana! Si te parece te saco una fotografía y empezamos con la charla.
Asiente, se acomoda para la cámara, y después, ya frente a frente, le pido que me cuente algo sobre él.
Las palabras brotan suavemente de su boca y me doy cuenta que no van a hacer falta las preguntas.
- Yo estuve de los dos lados de la vida- me dice -Conocí el mundo sobre mis pies hasta los cuatro años, luego sobre bastones y ahora lo vivo sobre ruedas. Mi vida no fue fácil, pero de que sirven las quejas a esta altura, estoy en la plenitud de mis años y he aprendido muchísimo. Ya quedaron atrás los años que pasé sobre esa cama de hospital, llorando de dolor, de angustia, entre quirofanos y cirugías, lejos de mi familia. Estuve tantas veces con escayolas y barras en mis piernas que ya me había acostumbrado a vivir con ellas. Cuando me las sacaban me sentía desarmado, débil. Sin embargo tuve cerca a esos amigos inolvidables con los que compartíamos el mismo dolor y nuestros propios códigos y juegos. Después de un largo tiempo comprendieron que nada podía hacerse, la polio se había apoderado de mi cuerpo y dejaría sus huellas. Algunas pueden verse con solo observarme, otras son más profundas. No todas son tan malas, algunas son maravillosas, sobre todo cuando recuerdo todo el amor que recibí de las distintas personas que se encargaban de mí en esos tiempos. Al principio fue difícil, me sentía diferente, todo me costaba más. Pero siempre tuve el apoyo de mis seres queridos y mi propia fuerza de voluntad. Y desde el día en que tuve plena conciencia de lo que me pasaba, tomé la decisión de salir adelante, de luchar y de ser feliz con lo que me había dado la vida. Y mi esfuerzo dio sus frutos, hoy tengo una profesión, me enamoré y formé una familia hermosa. Como verás, siempre sonrío, primero porque estoy vivo y también porque tengo un millón de razones para ser feliz, y casi ninguna para no serlo.- me mira y agrega -Espero no haberte aburrido. ¿Querés preguntarme algo más en particular?
-No hace falta, Julián. Gracias por tus palabras, sinceramente te admiro.
-Gracias a vos, espero que te sirva esta charla para tu trabajo práctico.
-Por supuesto, para eso y para mucho más.
Nos quedamos un rato más tomando el café, después él se va para comenzar su día laboral. Yo me quedo sentada, escuchando una y otra vez lo que había grabado. Comprendo que todavía me quedaba mucho por aprender de la vida, sobre todo aprender a disfrutarla.
Sindel Avefénix
Más rostros de la polio en lo de: José Vte - El sueño de la colina
Gracias José Vte.
Todos los textos que están expuestos en este blog son propiedad intelectual de mi persona y están registrados bajo el nombre Sindel Avefénix. Salvo menciones expresas de otros autores.
Bueno no hay duda de que a pesar de las adversidades en la vida siempre hay cosas que te pueden hacer feliz. Por que no?.
ResponderEliminarMe gusto la entrevista y la forma de contar las cosas de Julian.
Besotessssssssssssssss
Muchas gracias! Debe ser que la felicidad está en nuestro interior y va más allá de cualquier problema que nos la quiera sacar.
EliminarUn beso.
Una bonita declaración de vida, bien expuesta sin rencores ni penas. Avisas de que te has excedido pero no lo he notado. Cuando está bien escrito fluye y se hace corto. Abrazos
ResponderEliminarMuchas gracias! Me alegra que no se haga largo, suelo respetar las palabras, pero esta vez se me fue de las manos.
EliminarBesitos.
Una sonrisa robada al dolor, una vida rescatada a pesar de sufrir cruel enfermedad....animosidad y felicidad en un rostro que lucha por mantener una familia que le da todo ...lo necesario para enfrentar la adversidad con apoyo y más esperanzas...
ResponderEliminarUn excelente relato....entrevista que recoge sentimientos y toca profundas emociones...
Afectuoso abrazo
Muchas gracias y bienvenida Pleamar.
EliminarMe gusta saber que te ha llegado este relato.
Un beso :)
Me encantan los recursos que siempre tienes para hacer los jueves Sindel... Una entrevista estupenda, cargada de experiencia, de optimismo a pesar de las adversidades vividas, unas palabras de Julián que trasmiten fuerza y valentía... Yo también me he emocionado al leerla...
ResponderEliminarSí, aún hay muchas cosas, muchísimas que tenemos que aprender de la vida... y de los guerreros que siempre luchan...
Me encantó preciosa...
Muchos besines...
A veces nos quejamos por cosas tan insignificantes, cuando veo estas personas que han podido superar cosas terribles, trato de aprender algo de ellas.
EliminarGracias por tus palabras, Perla.
Besitos.
¡Como me ha gustado esta entrevista Sindel!
ResponderEliminarComo cuenta el protagonista de tu relato, la vida hay que llevarla adelante, asumiendo lo que nos ha tocado a cada uno. Pero me encanta esa sonrisa del protagonista, ese mirar para adelante y esa sensación de optimismo una vez que se tiene claro que su vida va a ser diferente, y tratar de disfrutarla. Porque sí, se puede disfrutar de la vida aun con un bastón en las manos, unos hierros en las piernas o subido sobre un carro eléctrico. A veces es complicado, es entendible, pero hay desearlo para conseguirlo.
Nunca hay que tener temor y sí deseos de vivir.
Un abrazo Sindel y muchas gracias por participar.
Gracias a vos por esta propuesta que nos muestra otro lado de la vida, y nos enseña que salir adelante se puede siempre, pero depende de nosotros mismos.
EliminarQuise ver a este protagonista con felicidad, superado de su secuela y con una vida como la de cualquier otra persona, incluso mejor debido a su fuerza de voluntad.
Un abrazo enorme.
A veces nos cuesta abrir los ojos a la realidad según cómo la ven nuestros semejantes. Practicarlo nos suele abrir grandes horizontes.
ResponderEliminarUn abrazo
Así es Moni, cuando veo estas cosas trato de ser más comprensiva con la vida, y aceptarla como es. Son personas fuertes y admirables.
EliminarUn beso.
Amiga
ResponderEliminarNos gustaría invitarte para el próximo "Los Desafíos del Faro", un evento que se inicia hoy, el día 25, en nuestro Farol.
Sería un placer para nosotros contar con tu presencia y participación en esta iniciativa que, al igual que la anterior, promete ser animada y al mismo tiempo nos ayuda a acercarnos y fortalecer nuestros lazos de amistad.
Besos y abrazos de los amigos,
Argos, Tétis y Poseidón
NB : EL POST SERA PUBLICADO ESTA TARDE/NOCHE
Más tarde me paso a verla. Gracias!
EliminarCreo que escuchando testimonios de la envergadura del que tú has narrado... y a pesar de que cada uno lleva su propio equipaje personal a la espalda... a todos nos falta mucho para aprender a disfrutar de la vida en sus múltiples facetas...
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu enfoque.
Un beso
Muchas gracias! Solamente cuando se pasan cosas tan difíciles se aprende a disfrutar más la vida.
EliminarUn beso.
Una lección de vida en esa entrevista. Se asoma el sol a tus letras, amiga, para hacer cálido el frío nombre de la enfermedad.
ResponderEliminarUn abrazo
Hasta tus comentarios son poéticos, Rosa! Muchas gracias por tan bellas palabras.
EliminarUn beso.
Personas como esta son ejemplos vivientes para la sociedad.
ResponderEliminarY hay tantas que deberíamos aprender de ellas. Un beso y gracias por pasar :)
EliminarUn escrito fabuloso, la entrevistadora aprende del entrevistado y nunca mejor dicho. Durante muchos años he pensado que solo nos intuían aquellos más sensibles, el miedo a preguntarnos cerraba más el circulo del silencio. Solo los niños más osados que los adultos, preguntaban y como es lógico, los más pequeños eran los que podían comprender muchas cosas, que ahora aprende la entrevistadora.....Tu relato me ha encantado.
ResponderEliminarMuchas gracias y bienvenida Molí! Me alegra saber que te ha gustado mi relato. Un beso enorme.
EliminarPrecioso escrito, que describe muy bien la enfermedad. Ellos valoran la vida mejor que nadie, porque lo han pasado mal y se quedan con las cosas buenas, siempre...
ResponderEliminarMuchos besos
En los momentos difíciles uno elige si quiere continuar o abandonar el viaje. Ellos han optado por seguir y eso es admirable. Muchas gracias por pasar.
EliminarUn beso.
Genial, amiga. has creado un personaje que nos ha contado unas vivencias que podrían ser un testimonio real.
ResponderEliminarAbrazo fuerte.
Muchas gracias, amigo! Quise darle un poco de optimismo a este relato. Un abrazo enorme.
EliminarComo tú dices, nos queda mucho que aprender de ellos, y seguro que valoraríamos mucho más la vida.
ResponderEliminarUn abrazo
Hay que valorar más la vida, y tener de ejemplo a estas personas que tan mal lo han pasado y conservan su alegría.
EliminarUn beso :)
Repito lo de muchos, me maravilla tu capacidad en encontrar siempre una forma, un recurso, para contar una historia ...y en este caso, una que deja una gran enseñanza.
ResponderEliminarTe felicito. Un beso.
Muchas gracias, Alma! Me alegra mucho que te haya gustado.
EliminarUn beso enorme.
Que historia mas edificante. Encontrarse con una persona tan positiva, debe ser una maravilla. Gracias por contarlo
ResponderEliminarMuchas gracias! No tuve la oportunidad de vivirlo, pero siempre se puede imaginarlo.
EliminarUn beso.
Genial idea, la de una entrevista para visionar una enfermedad tan cruel como esta. Admiro esas personas, como tu protagonista que a pesar de los estragos logran vencer obstáculos para llegar a ser felices y llevar una vida normal.
ResponderEliminarBeso
Son admirables, y hay que seguir ese ejemplo cada vez que nos quejamos por cosas simples, y que se pueden superar facilmente.
EliminarUn beso!
Un tema muy profundo, muy serio, pero supiste tocarlo de una manera tan positiva que sorprende.
ResponderEliminarMis felicitaciones a tu espacio y a esta propuesta compartida.
Un beso.
HD
Muchas gracias, Humberto! Quise darle un toque positivo a tanto dolor que ha pasado esta gente, y a pesar de todo han logrado superarlo.
EliminarUn abrazo.
Entrañable relato. Un entrevistado que vive y trasciende porque su actitud es la correcta, dificil, pero correcta.
ResponderEliminarImpecable historia.
Besos
Muchas gracias, Alfredo! Hay gente que toma las dificultades y las convierte en pruebas para superar.
EliminarUn beso.
Me quedo con una frase: "Siempre sonrío porque estoy vivo..." A mi modo de ver habría que imprimirla en millones de camisetas y repartirlas en las grandes ciudades y también en los pueblos, para seguir el ejemplo de una persona que precisamente tendría motivos para escatimar sonrisas. Bonito relato, Sindel, un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias, Dorotea! Habría que ponerla frente al espejo todas las mañanas y aprenderla para practicarla.
EliminarUn beso enorme.
Bonito relato con un bonito remate! Hay que aprender a disfrutar de la vida porque es un regalo.
ResponderEliminarGracias por tu relato.
Un beso
Muchas gracias Mercedes y bienvenida a mi blog. Un beso!
EliminarNo hay como fijar la mirada en determinadas cosas para aprender lo que nos falta para disfrutar de la vida, ¿verdad?
ResponderEliminarTu frase resume perfectamente la foto y todo el resto del texto...
Besos